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lunes, 14 de julio de 2014

Carlomagno: el Moisés de la Cristiandad medieval

Carlomagno, miniatura del siglo XV.  British Library
Carlomagno, miniatura del siglo XV.
British Library

Lea el post anterior: En el 1200º aniversario: Carlomagno a la luz dorada de la Historia y de la leyenda

El Profesor Plinio Corrêa de Oliveira tejió los siguientes comentarios sobre el gran emperador.

Nosotros leemos lo siguiente sobre Carlomagno, en la gran “Historia Universal” de Juan Bautista von Weiss, historiador alemán católico condecorado por el Papa Beato Pio IX con la orden de San Gregorio.

“En el 772, con 30 años, Carlos tomó el gobierno del reino de los francos. Con razón Carlos se llamó Magno. Mereció ese nombre como general y conquistador, como ordenador y legislador de su inmenso imperio y como incentivador de toda la vida espiritual de Occidente.

Por su gobierno, las ideas cristianas alcanzaron victorias sobre los bárbaros. Su vida fue una constante lucha contra la grosería y la barbarie, que amenazaban a la Religión Católica y a la nueva cultura que nacía.

Nada menos que 53 expediciones militares fueran emprendidas por él, a saber: dieciocho contra los sajones, una contra Aquitania, cinco contra los lombardos, siete contra los árabes, de España, una contra los turíngeos, cuatro contra los ávaros, dos contra los bretones, una contra los bávaros, cuatro contra los eslavos, cinco contra los sarracenos de Italia, tres contra los dinamarqueses y dos contra los griegos.

En la Navidad del año 800, el Papa San León lo elevó a la dignidad de Emperador, fundando así la más noble institución temporal de la Cristiandad, el Sacro Imperio Romano Germánico.

El 29 de febrero de 814, Carlos falleció, después de haber recibido la Sagrada Comunión. Fue enterrado, según la leyenda, en un nicho de la Catedral de Aix-la-Chapelle, en posición erecta, sentado en un trono, ceñido de espada y con el libro de los Evangelios en las manos.


Es él el modelo de los emperadores católicos, prototipo de caballero y la figura central de la gran mayoría de canciones de gesta medievales”

Cuando se habla de Carlomagno, se sus hechos y de su grandeza, me viene a la idea la figura extraordinaria de Moisés, también con sus hechos y su grandeza.

Moisés estableció la ordenación política y social del pueblo electo, que era la prefigura dela Cristiandad.

Él recibió la revelación de los Diez Mandamientos de la Ley, lo que llevó al pueblo electo hasta las puertas de la Tierra Prometida, sacándolo del cautiverio.

Él estableció los elementos fundamentales para que el pueblo electo se fijase y de él viniese a nacer el futuro Salvador.

Moisés, catedral de Edinburgo, Escócia
Moisés, catedral de Edinburgo, Escócia
Carlomagno tuvo una tarea que, considerada en esencia, fue análoga a la de Moisés.

Él tomó el pueblo electo verdadero, que no eran más los judíos – que eran una prefigura del pueblo electo.

El pueblo verdadero, que es el pueblo católico, estaba sujeto a una servidumbre inminente de parte de los peores adversarios.

Y por una lucha tremenda, él venció todos esos adversarios y estableció los fundamentos de la Civilización Cristiana.

Para nosotros darnos un poco la idea de lo que fue la tarea de Carlomagno, tenemos que considerar las condiciones de su tiempo.

Hasta el siglo V de nuestra era, el Imperio Romano de Occidente cubría toda la Europa Occidental.

Y, en líneas muy generales, extendía sus fronteras desde el Rin y del Danubio hasta Portugal, en el sentido de Occidente; hasta Inglaterra en el sentido del norte, y hasta Italia en el sentido del sur. Era, por lo tanto, una inmensa unidad.

Aún más inmensa porque las vías de comunicación, mucho más lentas en aquel tiempo que en el nuestro, hacía que fuese muy difícil un emperador gobernar toda esa extensión.

De manera que las dimensiones del Imperio, calculadas en proporción con la máquina administrativa y política que debería mantenerlo uno, eran proporciones verdaderamente gigantescas.

(Autor: Plinio Corrêa de Oliveira, extractos de conferencia pronunciada el 30/12/72. Sin revisión del autor).


AS CRUZADASCASTELOS MEDIEVAISCATEDRAIS MEDIEVAISHERÓIS MEDIEVAISORAÇÕES E MILAGRES MEDIEVAISCONTOS E LENDAS DA ERA MEDIEVALA CIDADE MEDIEVALJOIAS E SIMBOLOS MEDIEVAIS

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